Sandra Pinda: la maestra culinaria de la CAI

Sandra Pinda, una leyenda en la cocina de la CAI

Con 25 años de experiencia entre fogones, charlas y abrazos, Sandra Pinda se ha convertido en mucho más que la cocinera legendaria del club. Para los jóvenes, es como una madre, una consejera y un ejemplo a seguir. Con recuerdos de generaciones pasadas y planes de descanso en mente, se despide de una vida dedicada a cuidar, alimentar y formar a los futbolistas de Comodoro. En una charla con nosotros, repasa historias y sentimientos de su rol en la Comisión de Actividades Infantiles.

Cuando Sandra Pinda llegó por primera vez a la Comisión de Actividades Infantiles, el club todavía no contaba con la infraestructura actual. Acompañaba a su hermano, que jugaba en la categoría 75, y desde entonces se quedó. "Siempre digo que la CAI es como mi segunda casa. Paso más tiempo aquí que en mi propia casa", afirma con una sonrisa que refleja orgullo y nostalgia. Durante 25 años, su rutina ha sido constante: mañanas y tardes entre ollas y fogones, sirviendo almuerzos y cenas para 60 chicos todos los días.

En nuestra conversación, Sandra describe con detalle la rutina diaria que para ella es más que un trabajo, es una vocación: cocinar, organizar, aconsejar y, sobre todo, cuidar.

Para Sandra, la cocina de la CAI es mucho más que un lugar para preparar comidas. Es un espacio de contención donde se enseña disciplina, educación en la mesa y hábitos alimenticios que complementan la formación deportiva. "Ellos vienen aquí para formarse como jugadores, pero también se forman como personas", destaca mientras evoca a antiguas figuras del club.

"No los veo como amigos, aquí soy como su madre", aclara. Esta figura maternal implica a veces darles consejos que pueden generar molestia en el momento, pero que al final les brindan más que comida: límites y cariño. Y cuando los chicos parten, ya sea de regreso con sus familias o para jugar en el extranjero, Sandra guarda sus nombres como trofeos de afecto.

El máximo goleador histórico de la CAI, Mauro Villegas, la recuerda con gratitud: "No solo nos alimentaba, sino que nos ayudaba en todo sentido: con consejos, en la vida, en reconocer nuestros errores. Mauro, quien actualmente es entrenador en las divisiones juveniles del club, destaca la importancia de la contención que brinda Sandra y la "Tana" a los chicos en las pensiones, lejos de sus familias.

En septiembre cumplirá 60 años y ya piensa en tomarse un merecido descanso. Le gustaría pasar más tiempo con su familia, sus nietos y tal vez emprender algún proyecto, pero lo tiene claro: se va "feliz". Trabajar con jóvenes la llena de satisfacción, y asegura que la CAI seguirá siendo su familia, incluso cuando reduzca su actividad.

Antes de despedir nuestra conversación, repite una frase que resume su vínculo con el club: "La CAI es una familia". Es la misma frase que pronunció al llegar, la que acompañó sus días en la cocina y la que cerrará esta etapa con el mismo amor con el que la empezó.

En síntesis:

Sandra Pinda ha dedicado 25 años de su vida a cuidar, alimentar y formar a los jóvenes futbolistas de la CAI, convirtiéndose en una figura maternal y ejemplar para muchos de ellos. Su labor ha trascendido más allá de la cocina, brindando contención, consejos y cariño a quienes han pasado por el club.

Preguntas frecuentes:

  1. ¿Cuántos años lleva Sandra Pinda trabajando en la CAI?
    Sandra Pinda lleva 25 años trabajando en la Comisión de Actividades Infantiles.
  2. ¿Qué destaca Mauro Villegas sobre la labor de Sandra?
    Mauro Villegas destaca que Sandra no solo les proporcionaba comida, sino que también les brindaba consejos y apoyo en diferentes aspectos de sus vidas.
  3. ¿Qué planes tiene Sandra para el futuro?
    Sandra planea tomarse un merecido descanso para pasar más tiempo con su familia y quizás emprender algún proyecto personal.

Crédito de la fuente original: www.diariocronica.com.ar