El fenómeno del cine nacional ha vuelto a sorprender a todos con el éxito arrollador de Homo Argentum. Más que una simple película, se ha convertido en el tema de conversación obligado, en la polémica que nadie quiere perderse.
Ya no importa quién la protagoniza, si es un clásico de Guillermo Francella o una propuesta innovadora de los directores Mariano Cohn y Gastón Duprat. Lo que realmente importa es formar parte de la discusión, estar al tanto de lo que se dice y se opina sobre esta cinta que ha cautivado a 467.518 espectadores en su fin de semana de estreno, marcando un hito en la historia del cine argentino.
En medio de toda esta controversia, surge la pregunta sobre el apoyo del INCAA, el Instituto Nacional de Cinematografía y Artes Visuales, a la producción de la película. Y la respuesta es clara: los productores de Homo Argentum optaron por no recurrir al INCAA, a pesar de tener ese derecho según la Ley de Cine.
Es importante aclarar que el financiamiento del cine argentino no proviene directamente del Estado, sino de los espectadores que pagan su entrada de cine. El 10% de ese valor se destina, según la ley, a la promoción y fomento de la actividad cinematográfica nacional.
A pesar de no haber contado con el respaldo del INCAA, la película podría beneficiarse ahora de un subsidio por taquilla, demostrando que hay diferentes formas de apoyo al cine más allá de las instituciones tradicionales.
En definitiva, más allá de las ideologías o preferencias políticas, la Ley de Cine está para garantizar un marco legal justo y equitativo para la industria cinematográfica. Como dijo una vez el presidente Javier Milei, “Dentro de la ley, todo; fuera de la ley, nada”.
En síntesis
El éxito de Homo Argentum ha generado un debate sobre el financiamiento del cine nacional y la importancia de la Ley de Cine para garantizar un marco legal adecuado para la industria cinematográfica.
Preguntas frecuentes
¿De dónde proviene el financiamiento del cine argentino?
El financiamiento del cine argentino proviene en gran parte de los espectadores que pagan su entrada de cine, destinando el 10% de ese valor a la promoción y fomento de la actividad cinematográfica nacional.
¿Por qué los productores de Homo Argentum no recurrieron al INCAA?
Los productores de la película decidieron no recurrir al INCAA, a pesar de tener ese derecho según la Ley de Cine, optando por otras formas de financiamiento y apoyo a la producción.
¿Qué beneficios podría obtener Homo Argentum a pesar de no haber contado con el respaldo del INCAA?
La película podría beneficiarse de un subsidio por taquilla, demostrando que existen diferentes vías de apoyo al cine más allá de las instituciones tradicionales.
Crédito de la fuente original: www.clarin.com